Parte II de La Fe en Jesús y la Virgen mueve montañas

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La Fe en Jesús y la Virgen mueve montañas

La Fe es un regalo inmenso que hay que pedirlo. He visto a lo largo de mi vida y lo he comprobado conmigo misma, como la Virgen es el camino más corto y más rápido para tener Fe en su hijo Jesús.

Si estamos alejados de Dios y queremos acercarnos y no sabemos cómo, recurramos a Ella. Nadie como Ella para llevarnos a Jesús. Nadie como Ella para instruirnos y guiarnos. En mi caso particular toda mi Fe se la debo a la Virgen.

Una vez entre a una casa de los salesianos, grupo fundado por Don Bosco, y me emociono encontrar un cuadro de la Virgen bajo la advocación de Maria Auxiliadora con esta frase: Ella lo ha hecho todo. Es que Ella lo hace todo en nosotros si permitimos que nos ayude. Así lo ha hecho conmigo y con tantas otras personas que conozco.

Pero, ¿como acercarnos a la Virgen si estamos lejos de Ella? En Salta Maria nos da la respuesta: a través del rezo del Santo Rosario. El Rosario es una oración poderosa, muy querida por la Virgen, capaz de mover las montañas más grandes cuando se reza de corazón y con Fe. Al principio nos cuesta un poco rezarlo, pero si perseveramos, es como si nos inscribiéramos en la Escuela de Maria y Ella atraves de esta sencilla oración, nos empieza a enseñar todo y nos acerca cada vez más a su hijo Jesús.

 

En mi caso particular, el rezo del Rosario cambio literalmente mi vida, especialmente en momentos difíciles que me tocó vivir hace varios años cuando mi hija se enfermó. Gracias al Rosario redescubrí mi Fe, la empecé a vivir desde el corazón y recibí las fuerzas y la paz que estaba necesitando. También fui testigo de milagros que le ocurrieron a mi familia gracias a su rezo.

 

Con respecto al Rosario la Virgen nos dice en Salta: “yo os amo mis hijitos y acudo presurosa a consolarlos cuando os acercáis a mí con confianza. Tenéis un medio poderoso de acercaros a mi Corazón y es mediante el rezo del santo Rosario. Rezando esta gratísima devoción podéis conseguir gracias. Pedid mis hijitos! Pedid la conversión de vuestros corazones y todo lo demás os será concedido. Amen, amen, amen.” Mensaje del 27 de agosto de 1996

 

La Virgen en Salta quiere que la llamen la Inmaculada Madre del divino Corazón Eucarístico de Jesús porque desea que pongamos nuestra atención en el Corazón Eucarístico de su hijo. Su objetivo es recordarnos el gran tesoro que tiene la Iglesia Católica y que no tiene ninguna otra religión: Jesús vivo y presente en la Eucaristía, en la hostia consagrada. Nos lo viene a recordar, porque nos olvidamos y no somos conscientes de este gran don. La hostia consagrada no es un pedazo de pan, una representación de algo, es el mismo Jesús vivo, el mismo Jesús de la época de los apóstoles. Maria viene a recordarnos que en el Corazón Eucarístico de su hijo, presente en la hostia consagrada, esta toda nuestra esperanza y nuestra paz.

 

 

En unos de los mensajes desde Salta la Virgen nos dice: “ He venido desde el cielo a instruir vuestros corazones en el Amor verdadero que es Jesús”. Ella nos enseña que solo en su hijo Jesús encontraremos la Paz y el amor que todos buscamos. Una Paz que es muy diferente a la que da el mundo, ya que es posible mantenerla en los momentos de dolor. Paz aunque las cosas no salgan como nosotros queremos, Paz en los momentos de sufrimiento. Esta es la Paz que solo nos da Jesús. Y como dice San Agustín, nuestro corazón estará inquieto hasta que encontremos esta paz.

En conclusión, si estás pasando por un momento difícil, si hay montañas muy altas en tu vida que te cuesta enfrentar, acércate a la Virgen a través del Santo Rosario. Dejá que Ella te consuele y te guie hacia el corazón de su hijo Jesús, donde vas a encontrar las fuerzas y la paz que estas necesitando. Una vez que encuentres esta Paz, verás que ya no querrás cambiarla por cualquier otra paz que te quiera ofrecer el mundo. Tengo una muy querida amiga que esta con cáncer desde hace unos meses con un pronóstico muy malo. En su búsqueda de Paz y bienestar, ha incursionado por muchos caminos y por muchas religiones. Hace unos meses me comentaba: yo lo he probado todo, pero nada me da la Paz que me da Jesús y la Virgen. Por eso, ya no busco más nada, porque ya encontré lo que me hace feliz y plena.

 

A veces, puede pasar que a pesar de nuestra oración, las montañas no se mueven, pero nos llega la Fe y la fuerza para poder mantenernos en pie sobre ellas. Y esto también es un milagro, aunque nos cueste darnos cuenta.

 

Carmen Vaeza

 

Para aprender a rezar el Rosario: https://es.catholic.net/op/articulos/13325/cat/540/el-santorosario.html

 

Para obtener información sobre peregrinaciones a Salta desde Argentina: http://www.inmaculadamadre-salta.org/obra/

 

Para obtener información sobre peregrinaciones a Salta desde Uruguay:

http//www.peregrinacionsalta.com.uy/