Testimonio Milla: Recuerdos imborrables

Breve historia de lo q a mi… me pasó.

 La verdad que siempre fui prolija con mis estudios, los tengo en una carpeta y me los hacía regularmente. Pero un día me llama la secretaria de mi ginecólogo para decirme que necesitaban hablar conmigo por un temita de las mamas. Un calor me envolvió, el sudor se apoderó de mi y allí comenzaron los famosos sofocones de la edad… Tal vez el primero me apareció mucho antes, pero yo recuerdo este especialmente intenso. Sólo atiné a arreglar una cita y a pedir socorro a una amiga para que me acompañara.

Una genia mi amiga Silvina, se vino preparada con una libretita en la que anotaba todo lo que el médico decía y preguntaba todo lo que consideraba necesario. Lo abrumó a preguntas, yo callaba, no registraba. Por miedo, el miedo paraliza, estaba desconcertada, solo miraba la situación como si de otro se tratara. Efectivamente cuando salí de allí, me di cuenta que solo había entendido algo de “un grupo de calcificaciones agrupadas y que probablemente allí hubiese algo”. Leí lo que Silvina escribió, era claro y era largo. Allí comenzó un intenso trabajo hacía la superación de mi persona. Agradezco tener una amiga como ella, que tuvo la viveza y la frialdad necesaria para anotar con claridad todo. Esto lo rescato, siempre hay que ir con alguien para que anote lo que nuestra mente no puede incorporar en ese momento, la mente es selectiva y ustedes saben que muchas veces nos pasa esto.

Llegué a mi casa y lloré y llore amargamente. Lloré de pena, de odio ¿Por qué a mí? ¿Qué hice mal? Mi angustia era tremenda, tenía rabia. No recuerdo nunca antes haber pasado por tantos cambios de humor. Hasta que me tranquilicé. ¿Cómo encararía esto? ¿Cómo decirle a mi marido y a mis hijas? Tenía dolor, mi corazón desbordaba de llanto y mi mente estaba agobiada de preguntas y de desolación.

Que linda es la vida cuando tienes amigas que son tus ángeles guardianes.  Se organizaron y nunca se permitieron dejarme sola. Me acompañaron a sol y sombra independientemente que fuera mi marido o mis hijas, no importaba, ellas siempre a mi lado. Con una sonrisa, con una palabra de aliento, con un chisme, con gracia. Cómo las quiero. Escribo esto y mis lagrimas caen al recordarlas colocando sus mejores caritas, María, Peggy y Silvina… mis tres ángeles guardianes que hasta el día de hoy me cuidan con tanto amor. Gracias Dios mío por ponerlas en mi camino. Rescato esto, la contención tan necesaria frente a la adversidad, frente a las situaciones que no podemos ignorar, sino que apechugar literalmente en este caso.

Llegaron los llamados de amigos y familiares,  que parecía que yo tenía que contenerlos, la transferencia, el miedo a que no les toque hacían sonar en algunos sus palabras vacías de contenido. Aquí rescato el respetarnos a nosotros y no aceptar cargas y miedos ajenos. No podemos gastar nuestra energía en esto, cada uno tiene que lidiar con sus temores, tenemos que aprender a ser egoístas y a priorizarnos, para poder estar fuertes y con la cabeza fresca para resolver , tomar decisiones y actuar. Sabias palabras me aconsejó la madre de una amiga de mi hija Noel, me llamó y me dijo: “leé este libro, el cambio de alimentación es fundamental. No cuentes a nadie lo que te pasa, si no sabes lidiar con ello, gastarás tu necesaria energía en lo que no vale la pena. Hace Reiki, te ayudará y pon tu mente en positivo”. Gracias, lo seguí al pie de la letra. Aquí rescato el cambio de alimentación, la terapia alternativa y la privacidad de lo que nos ocurre. nosotros somos los únicos dueños de decidir a quienes les contamos y con quienes queremos compartir semejante experiencia. Por eso, cuando alguien me llama angustiada por un diagnostico de cáncer de mama,  solo repito los consejos, lo que a mi me resultó y siempre digo lo mismo tienes mucho trabajo por delante…ponte en acción.

Leí que hay que dejar los miedos, las frustraciones, los pensamientos negativos de lado, y creer fielmente en nuestra curación. La mente es poderosa y puede ser nuestra mejor aliada o nuestra peor enemiga. Es nuestra decisión, confiar en nuestros médicos y en la superación de la enfermedad y  buscar lo mejor de nosotros, nuestra mejor versión. Es tan linda la vida…Y yo con solo 52 años, cuatro hijas maravillosas y un marido extraordinario. Mi mejor amigo, mi compañero de ruta, mi máximo guía y líder como yo lo llamo…obviamente seguiré buscando lo mejor de mi.

En junio de 2009 la Ecografía mamaria bilateral arroja: se observan microcalcificaciones agrupadas, mama derecha, Birads 4. Comienzan estudios nuevamente.

En el Centro de Investigaciones Mamarias Dr. Manuel Cymberknoh en Bs. As. se me realizó: Punción Histológica Mammotome bajo guía estereotáxica digital de las microcalcificaciones ubicadas en la región interna de mama derecha, habiéndose introducido la aguja en forma cráneo caudal (de arriba hacia abajo). Se señalizó mediante clip metálico la zona punzada q servirá de guía para eventual marcación pre-quirúrgica posterior. Resultado: hematoma post punción con técnica mammotome. Marcación mamaria pre-quirúrgica.  Esto fue el 5 de agosto de 2009, fue la colocación de un clip post mammotome ubicado en la región interna de mama derecha. Carcinoma in situ. El 6 de agosto de 2009, me operan.  Que suerte que me tocó en esta época , en la que la medicina avanzó tanto. Antes, por esto, te sacaban la mama. Mi médico consideró que en mi caso, no era necesario ningún tratamiento extra. Pero mi nuevo médico quién me operó, especialista de Patología Mamaria me dijo: “por prevención usted se va a rayos y tomará una medicación por cinco años.”

 Tratamiento oncológico en Alexander Fleming

Rayos del 31 de agosto  al  21 de octubre.

AGOTAMIENTO—agotamiento—agotamiento.

Totalmente asociados a esta palabra. En esta época apenas llegaba a casa después del tratamiento, me ponía compresas de manzanilla fría. Las cambiaba una y otra vez y siempre sentía caliente la zona (preparaba las compresas  con un té de manzanilla en rama, una buena cantidad y le ponía hielo al recipiente, mojaba la toalla pequeña y la ponía en mi pecho hasta que se calentaba y cambiaba nuevamente).

Debo recalcar, que el tratamiento a cada uno le cae diferente de acuerdo a una cantidad de factores. A mi me agotaban, quedaba tirada en el sillón de casa, estaba excesivamente cansada. Lo peor era llegar a tu turno, que la máquina NO funcionara y tener que esperar. Rescato, si es posible elegir el turno, pedir los primeros de la mañana por cualquier desperfecto de las máquinas.

  Medicación: Tamoxifeno por 5 años. A muchas mujeres les produce ansiedad, se comen todo y después dicen que las pastillas engordan. ¡No! Tenemos que controlarnos, los kilos llegan rápido y vernos bien hace a nuestro animo. A mi se me intensificaron los calores, venían en cualquier momento y obviamente en los que yo menos quería… nunca me acostumbre a ellos.

 Estamos en el 2017, ya pasaron unos cuantos años y cada vez que me hago los estudios me sigue pasando lo mismo: me bloqueo. Me olvido de algo y el sudor se apodera de mí. Sigo siendo tan miedosa que me espanta… ¿Algún día lo superare??

Benditas amigas cada seis meses me acompañan. Mónica y María, porque saben que me pongo mal y no puedo superarlo. Y ellas aducen que van para hacerse sus estudios y me miran y yo siento el calor de sus miradas…. gracias, gracias y gracias.

¿Qué cambie con esta experiencia? Mucho la verdad.  Mi alimentación ahora es lo mas natural posible, hago Reiki, hice Shiatsu, hago Yoga, camino todos los días, hago baile dos veces por semana,  tomo medicina china diariamente y un vaso de agua tibia con limón en ayuna y no debo olvidarme mi avena diaria en el desayuno. Me reinventé. ¡YUPI! Me gusto mas. Hoy puedo decir que soy artista plástica, bloguera y abuela de corazón. Con cuatro nietos divinos, la vida me ha compensado. Tengo tanto para hacer, estoy tan entusiasmada con este blog y con mis obras de arte, que me producen una felicidad inmensa.